La magica utopía de Michal Pudelka
- Felino Plaza. Trendy Room Editor
- 24 ene 2015
- 2 Min. de lectura

DE JOHN EVERETT MILLAIS A VALENTINO
¡Ofelia!. Ante esta fastuosa representación todos los indicios nos llevan a la asociación con la dama de Hamlet. La historia implicita, la dama flotando, la desesperación denotada... se trata de Ofelia, pero no nos hallamos ni ante la polémica portada de Lars Von Trier y Kirsten Dunst con su Melancolía, ni ante la mismima obra prerrafaelita de John Everett Millais. Esta impactacte fotografía pertenece a la propuesta del fotógrafo eslovaco Michal Pudelka para la colección Primavera/ Verano de la maison italiana, Valentino.
Al igual que J.E.Millais cuando creó esta obra maestra (Ofelia, 1851. Tate Britain. Londres.) Michal Pudelkar refleja esa misma sensibilidad hetérea del personaje de William Shakespeare extrapolando la frialdad hermética de los acartonados catalogos de moda imperantes en la acutalidad para hallar un escenario desconocido, nuevo, marcado por el poder de la belleza, la frescura de la juventud y la armonía de la fragilidad, un mundo utópico donde la fluidez de la sensibilidad proyecta un halo de inspiración ante estas modelos de rostro inmaculado y piel blanquecina, dignas de la mismísima Ofelia de Shakespeare.
Las Ofelias de Pudelka son las modelos Maartje Verhoef, Grace Simmons, Hedvig Palm, Vanessa Moody y Clémentine Deraedt. Dichas reencarnan personajes mitológicos y dan vida a las protagonistas de esta utopía sensorial.
Maria Grazia Chiuri y Pierpaolo Piccioli, directores crearivos de la Maison Valentino, dan rienda suelta a la imaginación de Pudelka en esta campaña coral realizada en la costa Toscana. Michal, junto a su productora Katarina Gyu, concibe este trabajo como un realismo mágico y delicado transformando las típicas maniquís impecables, a las que nos tienen acostumbrados, en feminidades mitologícas urbanas que hipnotizan el panorama de la moda selecta más actual y sofisticada.
"De los cobardes no hay nada escrito", esta frase de mi querida abuela refleja este proyecto, su ilusión y su éxito rotundo. Chiuri y Piccioli se arriesgaron, fueron a lo dificil, a una apuesta no exenta de riesgo, apostaron por un enfoque, una idea, una concepción y un fotografo diferente, rompieron sus moldes, treparon sus fronteras y ganaron. El resultado es una obra de arte, que supera más allá de una mera campaña publicitaria más, que se graba en la retina de todo ser sensible que sepa apreciar la belleza plástica de las imágenes de Michal Pudelka y su sensibilidad implícita.
Felix Plaza.
Trendy Room Editor.
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